Desde hace muchos años atrás se conoce que la actividad económica de
sus habitantes se basaba en el comercio
de leña, carbón, algunos animales domésticos y una muy pequeña producción
agrícola los mismos que eran comercializados en la feria de Machachi también en
las épocas de producción del mortiño era una alternativa que les ayudaba en sus
sustento, todo este sistema de comercio
se lo realizaba en pequeña escala, porque en esas épocas la gente no accedía a
tener sus tierras como su propiedad y solamente su actividad se lo realizaba en
terrenos pertenecientes a las haciendas para las cuales trabajaba, y que a cambio de eso los dueños les permitía
tener una mínima cantidad de animales. Son aquellas épocas cuando los
pobladores de estos sectores solamente eran
simples serviles: Como capataz, peón, huasicama, ovejero, cuentayo, paje
o camero el máximo puesto que aspiraba ocupar un trabajador era el de mayoral,
ya que el mayordomo era una persona que venía de la ciudad y su mandato era una voz autorizada que remplazaba a dueño de
la hacienda. En aquel entonces se puede decir que todavía se vivía en un
sistema de explotación ya que la gente incluidos mujeres e hijos únicamente se
dedicaba a trabajar con una ínfima remuneración que lo pagaban al cumplirse el
año de labores
Posteriormente cuando las leyes gubernamentales fueron cambiando en
beneficio de los trabajadores pasaron a ser huasipungeros este episodio cambio
en algo el modo de vivir ya que les amparaba en tener un pequeño pedazo de
terreno en el cual podían trabajar de una manera más independiente pero siempre sometida a
las órdenes de los hacendados.
Debemos anotar que este pedazo de terreno era solamente una
recompensa en préstamo por los servicios brindados a la hacienda, que en cualquier
momento el dueño lo podía quitar.
Era un sistema muy mal implementado razón por la cual mediante el
mandato de una ley tuvo que desaparecerse para dar paso a otros sistemas más
efectivos para poder ayudar a los trabajadores.
En la década de los 60 con la finalidad de erradicar la mendicidad el analfabetismo y todos los
males que afectaban a los países tercermundistas surge una corriente
internacional de realizar una repartición de tierras para beneficio de los habitantes que no poseían terrenos donde puedan trabajar libremente, sistema que llega
también a nuestro país con el nombre de reforma agraria al cual se hacen
beneficiarios algunas personas, podríamos decir que no fue una solución
efectiva ya que los estudios técnicos no abordaron con sinceridad la
problemática de la tenencia de la tierra, porque eran lotes muy pequeños los
que se les adjudicaba y no eran un verdadero respaldo para poder solucionar las
necesidades económicas de las familias ecuatorianas, debido a que las
extensiones que se repartían no estaban aptos para la producción. Por lo cual
después de pocos años de haber puesto en práctica este sistema no dio resultado
y se comprobó que fue un total fracaso.
Posteriormente para la década de los 70 con el mejoramiento
económico del país debido a la explotación y exportación del petróleo la situación económica tuvo un
repunte muy importante y se produjo cambios sustanciales en la manera de ver las aspiraciones y progreso de
sus gentes es así que se produjo un libre manejo de la economía en bancos, negocios,
trabajos personales de un mercado con mayores oportunidades. He sitiado estos
importantes pasajes históricos de conocimiento general, con los cuales llego a
tener un gran repunte el desarrollo agrario ecuatoriano y en especial en cuanto
se refiere a la vida del chagra y su impacto en todo el sector del Pedregal,
comenzó la libre adquisición de bienes, de acuerdo a las posibilidades de cada
uno, esta corriente también se hizo
presente en los campesinos y tuvieron la oportunidad de adquirir propiedades
que se consideran ya aptas para poder desarrollar su actividad productiva a su
máxima capacidad. Así podemos describir que a finales de los años 70 y a
comienzo de los 80 se dio la circunstancia de que algunas grandes haciendas
pusieron en venta total o en lotes paraqué los adquiera cualquier persona de
acuerdo a sus posibilidades, tanto en tierras bajas de alta producción como
también en tierras altas como son los páramos, de esta manera en muchos casos
personas de ciudad, adquirieron tierras en los páramos porque tenían el afán de aprender y ejercer nuestras
actividades ancestrales de montar en un caballo de vaquería unido a la crianza
y manejo de ganad criollo bravo dio un mayor impulso y fortalecimiento de esta
noble actividad, para así cumplir los anhelos de ser trabajadores autónomos y
propietarios de sus sueños y realizaciones, de esta manera tuvo la oportunidad
de cultivar las propiedades en el agro y la ganadería con mayor impulso mejorando
así el nivel de vida de sus familias, y así pues refundir la personalidad
altiva, progresista y autentica del chagra.
Mejía al ser un cantón de tierras dedicadas a la producción agrícola
y ganadera es innegable que su desarrollo socio económico se basa en un altísimo
porcentaje en lo que hacen las personas dedicando a las labores agrícolas razón por la
cual que la población económicamente activa somos de una u otra manera los
chagras porque si unos dedicamos a la
agricultura en lugares bajos a la ganadería de leche o de carne en mayor
escala, otros en tierras más altas o en los páramos también desarrollamos lo
que es la crianza de ganado criollo de carne y también a los cultivos de altura
de una manera más conservadora y sostenida respetando el entorno natural de esta
manera seamos pequeños o grandes productores, campesinos, hacendados, peones, trabajadores
nos unimos siempre buscando un mismo fin que es tener una relación directa o
indirecta con la producción de nuestros campos para servir y atender las
necesidades alimentarias de los consumidores de las grandes ciudades.
No hay comentarios:
Publicar un comentario